Colombia, Texas y México se juntaron para tocar cumbia el pasado viernes en el marco del Festival de Acordeones que realiza la organización Bryant Park Picnic performances.
La cumbia es una moda en México y por supuesto en el lado chicano del sur de Estados Unidos. Y Colombia es la cuna del ritmo.
Liderando el ritmo estuvo el maestro Alberto ‘Beto’ Villa, ganador del festival de la Leyenda Vallenata en 2006.
Ese tal vez fue el momento cumbre de la jornada de acordeones que comenzó más temprano con el tango de Pablo Pereyra y Pablo Aslán en tributo a Juan D’Arienzo.
El acordeón también sonó por cuenta de Rusia con Fedor Chistyakov.
Los Texmaniacs tuvieron su turno con corridos y música popular mexicana y chicana más su estilo particular de cumbia.
El remate le tocó al conjunto de ‘Beto’ Jamaica que formó la locura en Bryant Park gracias a la notoria presencia de la diáspora colombiana en Nueva York. Pasando por el vallenato tradicional hasta cumbias.
El baile fue el gran invitado desde los bandoneones del tango donde sofisticados bailarines compitieron con el espectáculo de los músicos. Pero sin duda la apoteosis sucedió con la intervención del conjunto colombiano. Que se colmó cuando los músicos chicanos subieron a tarima para tocar una mezcla de cumbias con sus hermanos colombianos. Buen momento musical y de hermandad cultural que son la clase de circunstancias que hacen a Nueva York.
NC
NYC, 16 de agosto 2019
Colombia, Texas and Mexico got together to play cumbia last Friday in the framework of the Accordion Festival held by Bryant Park Picnic performances.
Cumbia is a trend in Mexico and on the Chicano side of the southern United States. And Colombia is the cradle of rhythm.
Maestro Alberto ‘Beto’ Villa, winner of the Vallenato Legend festival in 2006, led the jam.
That was perhaps the peak moment of the accordion journey that began earlier with tthe great Tango by Pablo Pereyra and Pablo Aslán in tribute to Juan D’Arienzo.
Russian accordion took its turn with Fedor Chistyakov.
Dance was part of the greatest guests. Sophisticated dancers followed Tango bandoneons giving an amazing show. But apotheosis occurred with the intervention of the Colombian band thanks to the great amount of Colombian visiting Bryant Park.
That got a hit when Chicano musicians took the stage to play a cumbian medley with their Colombian brothers. It was an awesome cultural and brotherhood moment, the kind of circumstances that make New York.
NC
NYC, 08/16/19
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