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“Vertebrar un programa de consciencia
global” es el llamado que nos hace el presidente del Uruguay, José Mujica.
Mujica fue uno de los personajes de la II
Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) reunida el
28 y 29 de enero en La Habana, Cuba.
La CELAC es ese intento de Latinoamérica
por consolidar una Patria Grande. Abrazando al Caribe .
¿Para qué? José Mujica: “¡La
globalización es un hecho! La globalización es un hecho que va camino del
desastre si no somos capaces de vertebrar un programa de consciencia -global-.
Pero hay que entender que la integración necesita aparatos especializados”.
Y la CELAC es uno de esos aparatos
especializados. En la Habana se reunieron 29 jefes de estado más la genial presidenta
electa de Chile, Michelle Bachelet.
Tremenda reunión, hasta a Santos se le
veía ahí sentado con su doble cara.
Por supuesto los medios no cubrieron el
evento porque el Amo no está invitado a esa tal CELAC. Es que la CELAC se creo
sin estados Unidos como un entendimiento de las naciones a la forma en que ese
país hace lo que se le da la gana sin contar para nada con vecinos o entes
internacionales, OEA y ONU incluidas.
Esa es una de las razones de la CELAC,
que los países Latinos y del Caribe actúen como uno y se hagan escuchar e
intervenir en una política global urgente. Una política que exige la protección
inmediata de los recursos del planeta y una oportunidad para que el hombre sea
libre.
Pero de nada sirve si usted –lector-, o
yo, no nos involucramos. Porque según Mujica, “aquello que no está prendido en
el corazón de los pueblos es apenas un acto de dirigentes, y los dirigentes no
cambian la historia de la humanidad. La historia de la humanidad la pueden
cambiar solo los pueblos”.
Las palabras justas del presidente Mujica
son un buen resumen de esta II Cumbre de la CELAC y la posición de los más
valientes presidentes y líderes Latinoamericanos y del Caribe…
“El hombre debe luchar por la felicidad
concreta, y eso es tener tiempo para vivir (…) Pero para que las masas puedan
tener ese tiempo, hay que cuidar los recursos, y hay que cuidar la política”.
Dice Mujica que la manera en que se hace política está acabando con la
confianza de los pueblos.
Fue ahí que les dijo a los presidentes
que “pertenecemos a una cultura invasora, agresiva, nos tenemos que vestir como
‘gentlemans’ ingleses porque ese es el traje de la industrialización”.
“Esta civilización del mercado ha
acrecentado la cultura del egoísmo y de la pérdida de la fraternidad humana”.
“Esta civilización va por delante y nos
lleva del hocico, y no podemos gobernarla”.
“Confundimos la necesidad de consumir con la
necesidad de despilfarrar recursos de energía”.
“Nuestro mundo no es perfecto, es
perfectible”.
Ahí cuenta cómo los chinos están
plantando millones de árboles con urgencia y “con esa constancia” que tienen
porque su atmósfera está contaminada. Sigue Mujica:
“Es una etapa histórica para luchar por
ser fuertes, aclararnos la cabeza y poder operar en este MUNDO, INFLUIR EN ESTE
MUNDO (sube la voz y el tono). Porque hay que influir en este mundo a favor de
Defender La Vida (emotivo imposta de nuevo).
“Y defender La Vida significa poder dejar
por el camino estas aristas de despilfarro, de contaminación, de pérdida de
energía, de esclavización del tiempo humano; pero a su vez poder mantener y
multiplicar los medios gloriosos que ha traído la ciencia y la tecnología a
favor de la vida humana”.
“No podemos enfrentar los terremotos, no
podemos enfrentar el viento…”
“Podemos juntar recursos si sujetamos
nuestro despilfarro”.
“Pobres de nosotros, si cada hindú va a
tener dos autos como cada alemán, no queda aire para respirar.
“Tenemos que entender que hay cosas del
planeta entero, porque el planeta tiene ¡li-mi-tes!”.
“Y nos lavamos las manos, y después nos
que-ja-mos”.
“Nada más que por estas pavadas, los
Latinoamericanos nos tenemos que integrar”.
Discurso del presidente José Mujica en la
II Cumbre de la CELAC, Cuba.
NC
Santa Pacha, Pance.
Enero 30 de 2013.
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