Gracias!

Acaba de pasar la fiesta de Acción de Gracias, “Thanksgiving”.

Estabas tan arrebatado que ni siquiera podías dar gracias.

Y hasta la sola idea de dar gracias te parecía excusa para maldecir la razón histórica de la tal fiesta, de los peregrinos y nuestros indígenas arrasados. Que absurdo, que todos los días, que esto, que lo otro...

Atascados en las ideas de furia -vengan de donde vinieren, super justificadas, argumentadas- cerramos las puertas del aprendizaje. De la Magia.

Cazamos cuanta batalla sea posible. Estamos cegados de ira. Y por ahí nos cegamos a ideas inteligentes. 

Es fácil, haz el ejercicio. Dilo en tu mente y luego en voz alta: Gracias.

En el ejercicio no te atasques. El fracaso no existe. No culpes. No te ensañes con el amor. 

El hombre vive etapas cíclicas que lo involucran en masa, por la razón que sea. Por terrible o bienaventurada que ésta haya sido, es.

Al salir de los abismos de tu mente puedes ver con sobriedad. 

Verás una a una las razones de entrar en ese sentimiento de gratitud. Se harán nítidos los rostros. 

Entonces tal vez, en la mañana, al despertar, lo agradezcas...

NC

Noviembre 27 de 2011