¿Aló?

Papá, Alvaro...

Hace un mes tomaste otro rumbo, y hoy te celebramos.

Acabo de hablar con Patico y me contó que se vieron: “Néstor, mi papá se me apareció en un sueño y me habló”, me dijo mi hermana.

Dice ella que tu le dizte un gran alivio cuando le dijiste: “Si a  mi me hubieran preguntado en vida cómo me hubiera gustado morir, hubiera elegido exactamente la manera como mori”, le dijiste.

Te estrenaste la pijama nueva, tenías la chaqueta que te gustaba y que mi mamá casi te bota... ¿Ja! Ahora Patricia se la pone. Está tu calor ahí viejo. Tu energía.

Gracias por comunicarte. 

Las mujeres son las maravillosas medium de los sueños -ese mágico canal con las dimensiones del Todo. Que bueno que a mi hermana le tocó verte y, además, descubrir esa dimensión inmensa en la que transitas. La Pato es un ángel.

Tio Hernando

Ella ha empezado a descubrir una serie de señales de la Gran Magia, del Todo, del Universo, de Dios, -los hombres queremos siempre poner nombres en esa necesidad de explicar, de racionalizar. 

Nos hace felices saber que te fuiste bien. 

Dice la Pato: “Lo vi como con un haz de luz en la cara; la cara brillante”. Con la pijama que te compró en el último cumpleaños, y que no te querías estrenar porque la guardabas para “un momento especial”. Ahí tuviste tu momento especial. 

Me contó que va cada domingo a la tierra donde despedimos tu cuerpo. (Tierra bastante lodosa, por la lluvia incesante.) 

Yo no sé cómo será la película en que marches. Pero yo te escribo. La próxima ayahuasca te la dedico.

Mantendré el rumbo. 

Es mi manera de celebrarte.

NC

NY, 30 de octubre de 2011

P.D. Adjunto las fotos que me envió mi tio William, ese bello. Tremendas fotos clásicas.