Esta es la historia de un buen hombre que plantó un naranjo en el jardín de su casa.
Lo cuidó con esmero; y en la madurez del árbol, cada mañana, se levantaba a las siete y treinta para ver si se asomaba algún fruto.
Y nada.
Pasó el tiempo, y, quizá por la tierra, o por lo que fuera, de naranjas, nada.
Un día, a las cinco y treinta de la mañana, la esposa del hombre levantó a sus dos pequeñas hijas entre mucho sigilo y con plan cómplice. Llevaba cestas con todo tipo de frutas, naranjas, peras, piñas…
-Vamos a poner estas frutas en el árbol para que cuando papá se levante, lo encuentre lleno de frutos.
Niñas y esposa usaron cinta adhesiva y, como pudieron, vistieron al árbol con las frutas.
Eran las siete y treinta y corrieron a esconderse y ver salir al padre.
Como cada mañana, aquel hombre se levantó y fue a ver al naranjo.
Se quedó ahí parado, tieso, por unos minutos. Veía asombrado a su naranjo. De la noche a la mañana, por fin, ahí estaban los frutos.
De pronto empezó a reír a carcajadas. Tal vez descubrió las piñas, las peras y otros frutos tan poco propios del naranjo…
Esposa e hijas salieron del escondite para abrazar al hombre…
Cuento esta historia que se cuenta en la película “Away we go” (2009), del director Sam Mendes. Una historia simple, un film hermoso e inspirador… Aquí un tributo…
Más información: http://www.imdb.com/title/tt1176740/
Gracias Samy por traerla, amo nuestro tiempo de cine... Cake & Ice Cream...
NC Bronx, Marzo 2010
3 comments:
Hermoso cuento...!
De lo mejor que he escuchado ultimamente...! Lleno de simplicidad, amor y belleza!
Gracias por compartir...
Gracias por recomendar la pelicula la voy a ver, suena linda, y se siente hermoso el tiempo de cine cake&ice creme de ustedes...
El comentario de arriba soy yo Claudia la que contaba 16 anhos, tu sabes la mas hermosa de la pradera...
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