Convivir, tejer, amar

Intenso cierre de año político.

Quiéralo o no, el ser, hasta la hormiga, es política. No la política corrupta que ha regido al hombre por milenios. No, me refiero a aquella Política = Convivencia.

Con permiso estas reflexiones…

Celebramos al Maestro José Mujica y el ejemplar Uruguay por el rumbo que toma en la producción, distribución y venta de marihuana. Con todo y las críticas hipócritas de quienes tratan de ensombrecer la valentía de este acto. Bien, buen rumbo. La legalización de todo ese obscuro mundo es urgente.

Por lo menos la gente empieza a entender que el mantener tal ilegalidad es solo una estrategia de los poderosos para preservar su ambición, mientras en el atontamiento mundial se asesina en países como México, Colombia, Afganistán, etc… Y cada vez se destapa quienes son los grandes capos: los negocios derivados del narcotráfico como bienes raíces, bancos, armas, deportes (es un descaro el lavado de dinero a través del fútbol, béisbol, baloncesto, automovilismo, etc.)

Celebramos a Michelle Bachelet en Chile. Gran victoria.

Maduro más Maduro.

Hasta el Papa Pacho sorprendiendo con posturas que lo han hecho señalar por el poder mundial como “comunista”, porque advierte que este consumismo devorador y la adoración al dinero y lo material nos está aniquilando. Ojalá no lo envenenen sus colegas del Vaticano…

Cada vez se ve menos televisión… Y se le cree menos a la prensa…

Cada vez hay más solidaridad para dejar de matar y comer animales de la manera voraz que lo hemos estado haciendo… Todo esto es política.

Y Colombia…  Por fin despertando. Lo de este diciembre da gusto: El movimiento social, de jóvenes, de pueblo-pueblo, que se ha levantado en rechazo a los abusos de la derecha gobernante por 200 años.

Más allá de que Petro se quede en la alcaldía de Bogotá, se vislumbra un movimiento activo-consciente, alejado de los corruptos partidos políticos tradicionales colombianos…

La tiranía histórica que ha gobernado a Colombia desde la independencia de España, ahora tiembla. Ya ha matado y aplastado cuanto se le opone. Pero tantos miles movilizándose ahora tienen la palabra. Ya crece la movilización más allá de Bogotá.

Y aquí, en este corazón y en esta mente, en el entendimiento de que la política sucede en cada ser que conozco, que trato, con el que me equivoco, con el que acierto, con el que amo…

Que incluso lo que yo piense o afirme debe sucumbir si aquel a quien amo perturba.

Que pedir perdón, o concederlo, diviniza, armoniza.

Que todos “Somos”, como me enseñaron unos muralistas guerreros de luz… Y que vamos “tejiendo” como me enseñó la Gran Comunidad indígena Nasa.

La Gran Magia observa a estas hormigas llamadas seres humanos tratando de entendernos, convivir y armonizarnos…

Camino al solsticio…

Padre Sol y Madre Luna en romance…

Saludos hermanos… Buen tiempo, buen camino…

NC
Bogotá, 18 de diciembre 2013.

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