"Este libro tormentoso y atormentado que
llega a sus manos luego de cuarenta años de su
primera edición recoge la tragedia del pueblo
colombiano desgarrado por una política nociva
de carácter nacional y regional y diseñada
por una oligarquía que se ha perpetuado en
el poder a toda costa, desatando el terror y la
violencia. Esta guerra insensata ha sido prolífica
al destruir lo mejor que tenemos: al pueblo
humilde. Por periodos sucesivos, la violencia y
el terror vuelven a levantar su horrible cabeza
enmarañada de Medusa, como copia casi fiel de
lo ocurrido antes; y ahora, al adentrarnos en el
nuevo siglo, la tragedia tiende a repetirse paso
a paso de manera irresponsable."
Esa es la introducción del libro La violencia en Colombia en su edición del 2005 editada por Taurus-Alfaguagara, escrita por el maestro Orlando Fals Borda, y que hoy 19 de abril, y en Feria del Libro de Bogotá, cae perfecta para el análisis.
El 19 de abril nos recuerda cómo ese ciclo de la “violencia cáncer” -así la calificaba el libro citado-, la violencia cáncer que padecemos en Colombia llegaba a uno de sus punto críticos, cuando las oligarquías, las aristocracias que se creen dueñas del país, se robaron las elecciones para evitar que Rojas Pinilla les cortara la teta y les quitara el poder por mandato y voto popular. Algo que ya habían hecho asesinando a Gaitán en 1948.
El 19 de abril de 1970 se realizaron las elecciones presidenciales entre Gustavo Rojas Pinilla y Misael Pastrana Borrero.
El presidente era Carlos Alberto Lleras Camargo, quien luchaba a toda costa y sin recato político para que Pastrana Borrero saliera electo por encima de Rojas Pinilla, y así terminar y consolidar el Frente Nacional, ese pacto de oligarcas políticos que se repartieron el poder entre 1958 y 1974.
En la noche ganaba Rojas Pinilla y cortaron los informes de los borregos de la prensa de entonces. Y en la mañana amaneció ganando Misael Pastrana, el papá del Pastrana éste que nos queda, como el cáncer que representan estas familias y que se ha enquistado en el poder perpetuando la violencia en Colombia, como lo expresa el libro del sacerdote Germán Guzmán Campos, el jurista Eduardo Umaña Luna y el catedrático Orlando Fals Borda.
Se las robó Misael Pastrana Borrero con la complicidad del presidente Carlos Lleras Camargo. Con el mismo cinismo que hoy ostentan sus descendientes.
Sí, los abuelos de los hoy todavía vigentes Lleras y Pastrana. Parte de esas familias que se han mantenido malgobernando Colombia por todo el siglo XX y XXI.
rda todo eso porque el 19 de abril de 1970 el pueblo colombiano salió a votar contra estos que todavía mantienen el poder a pesar de que ahora tengamos un gobierno supuestamente de izquierda que les cortó la teta.
Pero Petro, en otra de sus jugadas malhechas, en una chambonada que lo hace ver como a un tiranillo bananero, decidió decretar día cívico. Y toda esta historia quedó en la papelera porque Petro hoy cumple años y el domingo salen a marchar en su contra.
Será que nadie se le para y le dice, hombre, no hagas estupideces…
Que las chambonadas del gobierno “del cambio” no nos nublen sobre la historia de la Violencia Política que Colombia todavía padece.
NC
Bogotá, 19 de abril 2024
Fotos: En orden: El sacerdote Germán Guzmán Campos, el jurista Eduardo Umaña Luna y el catedrático Orlando Fals Borda, creadores (escritores) del libro La Violencia en Colombia.
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